martes, 24 de noviembre de 2009

Curriculum de Carlos




Exposiciones individuales:

2001 Cafetería y Galería "Square one" Lancaster, Pennsylvania, Estados Unidos."Máscaras"
1997 Galería Sophía Wanamaker, San José, Costa Rica,
"En casa de herrero cuchillo de palo".
1994 Hotel San Gildar, Escazú, Costa Rica."Ensambles y objetos textiles".
Galería Nacional de Arte Contemporáneo, Costa Rica,"Carlos Vargas ... entreverando..."
1993 Cuartel de la Boca del Monte, San José, Costa Rica, "A mecate corto".
1992 Universidad Nacional, Heredia, Costa Rica "Arte o artesanía".
1991 Galería Tinka, San José, Costa Rica "Rescate".
1989 Teatro Melico Salazar, San José, Costa Rica "A mecate corto".
1987 Galería José Figueres F., San José, Costa Rica "Mecateando".
1986 Aeropuerto Juan Santamaría, Alajuela, Costa Rica "En blanco cabuya".
1984 Centro Comercial El Pueblo, San José, Costa Rica "Trabajos en cabuya".



Exposiciones colectivas:

2008 en el marco del FIA se presentó una isntalación realizada junto con el artista Adrián Gómez, llamada "Bosque Luminoso" en el parque Metropolitano La Sabana.
Ha participado en 18 Exposiciones Colectivas, "Reflejos del espíritu", año 2001 en Mulberry Art Studio, Lancaster, Pennsylvania, Estados Unidos. También ha participado en el año 1989 en la Tercera Bienal de La Habana en el Centro Wilfredo Lam, en La Habana, Cuba.

lunes, 23 de noviembre de 2009

Más de mis creaciones



"Persona quiere decir Máscara y cada uno de nosotros tiene muchas. ¿Hay realmente una verdadera que pueda expresar la compleja, ambigua y contradictoria condición humana?
Ernesto Sábato





Máscaras y objetos hechos en barro
El barro y la fibra se amalgamaron, recordaron que reyes y deidades los usaron en sus tocados y adornos.
Y los objetos:

Piezas únicas y originales hechas con técnicas primigenias: rollos, pastillajes, esgrafiados, bruñidos, ahumados, que se integran con materiales contemporáneos.




El juego con la cerámica, con el barro, como elemento primigenio de la Creación.
Estas piezas han sido expuestas en diferentes espacios, y actualmente algunas de ellas pueden ser vistas en la Galería Yar Burba.



viernes, 30 de octubre de 2009

Nela Salgado: "Se busca Arbol Vivo", 5 de nov. en Yar Burba



Se busca Arbol Vivo, exposición Nela Salgado en Yar Burba

“Se busca un árbol vivo”
El árbol es símbolo de vida. Cuando nos encontramos inmersos en una arboleda nos sentimos serenos, sosegados, descansados y tranquilos, porque el árbol trasmite paz. Los árboles son esos seres que nos acompañan desde siempre, y cumplen, calladamente, su incansable labor de proveernos el oxígeno que necesitamos todos los días para sobrevivir en este mundo tan convulso. Los árboles son, en pocas palabras, nuestros amigos incondicionales de toda la vida.
Por ello, una de las mayores amenazas para la existencia del ser humano en nuestro planeta es la deforestación. Desnudar el planeta de sus bosques y de otros ecosistemas como de su suelo, tiene un efecto similar al de quemar la piel de un ser viviente. Porque los bosques ayudan a mantener el equilibrio ecológico y la biodiversidad, limitan la erosión en las cuencas hidrográficas e influyen en las variaciones del tiempo y en el clima.
Los árboles, pues, cumplen con la magia de la vida, pero aparte de su importancia para mantener latente el planeta, tan amenazado en los últimos decenios por culpa de la raza humana, el árbol es símbolo indiscutible de la belleza. ¡Cuánto disfrutamos al ver un árbol con su fuerte tronco, sus raíces que se hunden en la tierra, sus ramas que se mueven al compás del viento, sus flores y sus frutos!
El árbol inspira nobles sentimientos nos invita a invita a vivir, a ser felices. Por ello, cuando nos invade la tristeza, no hay nada más reconfortante que abrazarse a un árbol; es una experiencia maravillosa.
Por ello he decidido exponer en galería Yar Buba ubicada en el barrio Escalante, una serie de trabajos que evocan la existencia de nuestros amigos los árboles.

Como se podrá observar, utilizo una técnica novedosa que consiste en ensamblar cientos de fragmentos de tela de aproximadamente un centímetro cuadrado y de los más diversos colores, evocando el trabajo de los puntillistas, donde lo verdadero se forma en la retina de nuestros ojos y lo que apreciamos finalmente es la vibración global del trabajo artístico.

Para lograr este cometido en le formato final de esta obra, mi mente ha girado en tono al árbol en diferentes colores y tamaños, utilizando la técnica mixta a través de la tela, el acrílico y el óleo.

En esta tarea de magnificar la majestuosidad del árbol en un lenguaje elemental, he buscado incansablemente plasmar lo extraordinario de su significado, su enorme belleza plástica y su aporte a n nuestras vidas en una técnica elemental, como si la parte más inocente de mi alma se estuviera manifestando.

Porque el árbol, al igual que los niños, ha sido maltratado y explotado a través de los siglos, violentado sin misericordia en medio de un gran silencio mientras se nos ha ido pasado, lenta pero inexorablemente, la factura por su irresponsable destrucción.
Las imágenes que descubrimos en esta muestra nos llevan irremediablemente a nuestros años de la infancia, cuando dibujábamos una casita y junto a ella un árbol grande, vigoroso, lleno de vida y color, todo plasmado en un lenguaje universal y eso es precisamente lo que pretende el arte: la búsqueda de un lenguaje universal que alimente nuestro espíritu sin distingos de edad, igual a un niño que a un adulto o un anciano.

La técnica o el material que he utilizado en esta faena artística me encontró a mí esta vez en vez de buscarla yo, y, como siempre, con una actitud de ver en todo algo utilizable, de rescatar del baúl del recuerdo materiales maravillosos salvándoles del basurero donde suelen acabar.

Porque mis ojos siempre andan buscando incansablemente diversas opciones o posibilidades y esta vez ocurrió que un familiar mío, cuya existencia busca ya los cien años, ha dedicado parte de su días a cortar pedacitos de tela para ejercitar su fuerza motora. Al apreciar su rutina y el producto final de ese material tan maravilloso, allí mismo supe que era la materia prima idónea para mi próximo trabajo y que sin duda lo iba a aprovechar pues en ese momento vibraron en mis ojos sus colores revueltos y en mis manos pude entonces sentir las diferentes texturas.

Momento decisivo: ya tenía el lenguaje adecuado para compenetrarme con los árboles. Había descubierto que existía mucho en común entre estos diminutos pedacitos de tela que venían de fibras vegetales y lo que en mi mente me venía dando vueltas desde hacía algún tiempo: rendirle tributo a al árbol, nuestro entrañable amigo.

No todo ha sido fácil: estos fragmentos de tela me obligaron a conocerlos en su textura, su color y su significado. Unos eran fáciles de pegar; otros no tanto, y ¡claro! me hubiera encantado coserlos a mano, pero mi motora fina nunca ha sido tan fina, así que los coloqué pegándolos paciente y entusiastamente uno a uno, descubriendo de esa forma que algunos tendían a deshilacharse y que otros vibraban más de la cuenta.

Con relación al nombre de la exposición “Se busca un árbol vivo” pretendo hacer un llamado de atención, tal y como se hacía con los bandidos en el viejo oeste, cuando se ofrecía una recompensa en efectivo por el cuatrero vivo y no muerto. Hoy, la recompensa que buscamos es garantizarle más vida al planeta tierra.

La tarea ha sido ardua y paciente, pero muy enriquecedora -y sobre todo fascinante- puesto que cada trabajo es un árbol distinto, un mundo diferente. Esa es la esencia del mensaje: que el público logre, a través de estos trabajo, elementales pero significativos, retomar la inocencia que nos dio el ser niños, por un lado, y tomar conciencia de la importancia de preservar nuestros árboles, esos incomparables amigos que nos transmiten la alegría de vivir.

jueves, 29 de octubre de 2009

Mural cerámico





Podría decirse que este es mi primer mural cerámico público. Está ubicado en el Barrio Escalante, 50 norte y 10 al oeste del CCCN, en la fachada de la empresa turística Ecole Travel, al frente de las instalaciones de la escuela de arquitectura de la Universidad Hispanoamericana.

El mural consta de dos partes, compuesto de pocos elementos, representando la flora y la vida marina simbolizada con la interpretación de una tortuga en el fondo marino.

El proceso de elaboración del mismo fue de dos meses aproximadamente, para lo que se preparó la superficie de las paredes, ya que presentaban problemas de desprendimiento de los repellos.

Una vez resuelto el proceso de diseño, se procedió a la compra de las losetas para ser quebradas acorde a las necesidades y efectos del mural.

Al estar la fachada dividida en dos segmentos se pretendió dar unidad de la composición por medio del color y del trazado de algunas lineas en diagonal que se trasladan de un área a otra.
Para lograr integrar el área de entrada de las cocheras se intervinieron las columnas con algunos diseños de vegetación.

martes, 27 de octubre de 2009

Galería Yar Burba, presenta arte de Bhutan






En Yar Burba, arte de Bhutan,una tierra donde el aire y el fuego renacen.

Obras realizadas con fibras, hilos, maderas, textiles ancestrales..

Dos caminos...



Uno, práctico, utilitario,funcional, donde dos materiales convergieron..

otro,como un altar, como tejiendo el tiempo...

Entretejiendo caminos.

La vida es como el telar: todos los días hay que prepararlo para tejer y cuando terminas un tejido, prepararlo de nuevo. Es como el "eterno retorno", "comenzar de nuevo" y cada etapa lo mismo pero diferente.

Son 35 años preparando el telar y tejiendo una y otra vez, piezas únicas, irrepetibles, como cada camino en la vida: nunca volvemos por el mismo camino: siempre algo cambia, difiere...

cosas...entre cuerdas,barro y el tiempo...


Hola amigos : a partir de este momento les presento parte de mi proceso creativo, no sólo de textiles y céramicas, sino también de procesos creativos que a lo largo de mi vida he ido desarrollando, procesos manifestados con diferentes materiales, técnicas, objetos que vuelven a tener vida nueva después de ser rescatados del abandono y la indiferencia.

Encontrarán reminiscencias, imágenes, caprichos, diálogos internos, que con el tiempo se han ido acumulando a lo largo de los senderos, en diferentes estancias en las que he rondado. Además verán espacios tomados, donde el tiempo y el aire convergen entre texturas, luces y sonrisas.

Muchos son mis referentes, pero ante todo he tratado de seguir mi intuición y estar al tanto de lo que las piedras me quieran decir.